Cada vez es más habitual encontrar termostatos instalados en las viviendas. Estos dispositivos están directamente relacionados con la temperatura en el interior de las casas, y también con el control de esta. Aunque todavía son muchas las personas que no conocen exactamente su función o que no están seguras de cómo definirlos. En este artículo encontrarás toda la información detallada acerca del termostato, su uso y las preguntas más habituales al respecto.
¿Qué es un termostato?
Un termostato es un dispositivo que podría definirse como la evolución natural del termómetro. En ambos casos, su función principal es la de medir la temperatura de un determinado lugar. Sin embargo, el termostato añade otras importantes funcionalidades, empezando por ser capaces de controlar y regular dicha temperatura, aumentándola o disminuyéndola, dependiendo de si detecta que hace frío o calor en la vivienda.
Esta definición, que puede parecer muy simple, en realidad es muy compleja en cuanto al funcionamiento del termostato. Por eso es conveniente conocer su funcionamiento, los tipos de termostatos que existen, y las características de cada uno para escoger el que mejor se adapte a cada vivienda.
Antes de profundizar en los diferentes tipos de termostatos, cabe destacar algunas de sus características básicas de funcionamiento, que todos los modelos comparten. Como es el hecho de que el termostato se encarga de abrir o cerrar el circuito eléctrico del sistema de calefacción o del de refrigeración según la temperatura que se quiera alcanzar. Además, cualquier termostato de temperatura realiza una serie de mediciones que van más allá de la temperatura interna para llegar a la mejor solución, como el nivel de humedad, la concentración de CO2, o la temperatura externa.
Tipos de termostatos
Instalar cualquier tipo de termostato de calefacción o termostato de aire acondicionado es siempre una buena idea. No obstante, cada uno de ellos cuenta con sus propias ventajas y con una serie de características que debes conocer para saber si es el más adecuado para tu vivienda.
Termostato analógico
También llamados termostatos mecánicos, estos dispositivos son los más sencillos que podemos encontrar. No en vano, son también los más antiguos, por lo que quizá sean los menos recomendables en viviendas que quieran conseguir un mayor aprovechamiento de la energía.
Funcionamiento y control
El funcionamiento del termostato analógico es también muy sencillo. Cuenta con un mecanismo de encendido y apagado que solo le permite mantenerse en esas dos posiciones y programar dos temperaturas, una para la noche y otra para el día. Lo que hace es activar y desactivar la calefacción en base a la temperatura interior y a variables que detecta, como los hábitos de vida de los habitantes de la casa.
Termostato digital
El siguiente diseño de termostato fue el termostato digital, que mejoraba la calidad y la precisión de los anteriores. El principal cambio con respecto al termostato analógico es que se añadía una pantalla digital de cristal líquido donde se pueden obtener otras mediciones además de la temperatura, lo que facilita el control de esta.
Funcionamiento y control
El funcionamiento del termostato digital se complica, aunque tiene siempre como objetivo la mejora del control de la temperatura de la vivienda. Su tecnología y características permiten programar la temperatura a cualquier hora del día o por el intervalo de tiempo deseado, al igual que la calefacción de calor azul. Incluso con una temperatura diferente para cada día de la semana. También se pueden programar en base a las rutinas de las personas que viven en la casa, lo que se conoce como cronotermostatos o termostatos programables. Una gran ventaja para las personas que requieren un mayor control según sus hábitos
Termostato inalámbrico
Muy cerca de los anteriores se sitúa el termostato inalámbrico. Un dispositivo diseñado para poderse colocar en cualquier lugar de la casa, y que además se puede controlar desde la distancia. Añadiendo nuevas mejoras que en definitiva buscan mejorar la comodidad y la vida de las personas.
Funcionamiento y control
Estos termostatos se recomiendan para sistemas de calefacción independientes. Entre sus funciones, destaca el hecho de que también son programables y que suelen incorporar una pantalla donde exponer los datos recogidos.
Termostato inteligente con wifi
El modelo más actual y tecnológico del mercado es el termostato inteligente. Hay que tener en cuenta que son los más caros del mercado debido a sus características, pero la inversión compensa a la hora de tener un termostato wifi que se puede gestionar en remoto y que ofrece muchas más funciones que otros sistemas más antiguos.
Funcionamiento y control
El funcionamiento del termostato de calefacción wifi es similar a otros termostatos. Controla la temperatura del interior de una vivienda a través de una serie de mediciones. La principal diferencia es que su tecnología permite que alguien en la lejanía, con otro dispositivo conectado a internet, generalmente un teléfono, pueda tomar el control del aparato. Así, desde un smartphone o una tablet es posible encender y apagar el termostato desde cualquier lugar, pero también programar la calefacción o gestionar la temperatura. Incluso los más novedosos cuentan con un sistema de geolocalización capaz de advertir cuándo el propietario de acerca a casa para activar la calefacción.
Termostato modulante
También conviene conocer el termostato para caldera o termostato modulante, un tipo de termostato muy diferente a todos los anteriores. Y es que su destino se encuentra precisamente en la caldera, pero solo en las modulares. Y ahí se encarga de variar la potencia de la caldera tras tomar la medición de temperatura del lugar. Lo que va a permitir el máximo ahorro económico para los usuarios. Además, pueden encontrarse estos termostatos en todos los formatos descritos, programables, inteligentes o inalámbricos, por lo que existen opciones para todas las necesidades.
¿Cómo ahorrar energía con un termostato?
Se podría decir que el termostato consigue ahorrar energía desde el primer momento en que se instala. Y esto es debido a que toma el control sobre la temperatura para evitar que aumente o descienda demasiado. No obstante, existen algunas prácticas o hábitos de consumo que pueden seguir los usuarios para mejorar su ahorro. Toma nota de ellos.
- Apagar la calefacción o mantenerla al mínimo cuando no haya nadie en casa,y programar el termostato para que comience a funcionar unos minutos antes de que la primera persona esté de vuelta.
- Mantener una temperatura media durante todo el año de entre 20 y 23 grados. Incluso algo más baja durante la noche.Según los estudios, esos son los niveles de la temperatura de confort, por lo que no es necesario subirla más para estar bien. En todo caso, es preferible usar más ropa de abrigo que subir la calefacción, porque el gasto aumentará considerablemente.
- Otro truco recomendable para conseguir un mejor rendimiento del termostato es colocarlo en lugares frescos y secos, pero siempre los que más movimiento tengan en la casa, como el salón o las habitaciones.
- Incluso puedes ahorrar energía y dinero a través de un buen aislamiento en la vivienda, lo que también ayudará a un mejor funcionamiento del termostato.
Beneficios de instalar un termostato
A estas alturas, es más que probable que ya seas consciente de los beneficios de instalar un termostato en casa. Este regulador eléctrico mejora la eficiencia de la vivienda en cuanto a su temperatura, de modo que pueden obtenerse una serie de ventajas desde el primer momento de su instalación.
Mayor comodidad en la vivienda
Se acabó pasar calor o frío. Gracias al termostato la temperatura estará siempre controlada y en un término medio. Algo que influye principalmente en la sensación de confort al llegar a casa, y que se mantiene en todo momento.
Máximo ahorro económico
Como ya hemos visto, la instalación de un termostato implica un ahorro económico que se empieza a comprobar desde el primer momento. Algo que, tal como está la economía y el precio de la energía en la actualidad, supone una auténtica recompensa para las familias de toda clase.
Eficiencia energética
También es importante destacar que, a través del ahorro energético, se realiza una práctica sostenible y respetuosa con el medio ambiente. Cosa muy necesaria para ayudar a cuidar del planeta, de modo que los beneficios se encuentran a todos los niveles.
Multitud de opciones
Son muchas las opciones que existen para instalar un termostato adecuado para una vivienda. Además de todos los mencionados anteriormente, existen modelos menos conocidos con funciones muy específicas, como el termostato de radiador o el termostato de nevera, llamado termostato frigorífico.
Si todavía no cuentas con un termostato en tu vivienda, quizá sea hora de pensar en instalarlo. Podrás empezar a disfrutar de sus beneficios y de las mejoras en tu vivienda en poco tiempo, y su instalación no conlleva ningún problema para ti.